Las fragancias de vainilla se asocian a menudo con notas dulces y nostálgicas, pero el aroma de la vainilla es complejo, con tonos balsámicos, amaderados y amargos. La vainillina aporta el dulzor característico, pero la vainilla también se utiliza en fragancias amaderadas, especiadas y orientales. Originaria de México y producida actualmente en Madagascar, Indonesia y China, el aroma de la vainilla varía según la región: la tahitiana es afrutada y floral, la bourbon es intensa con un alto contenido en vainillina, la indonesia tiene una nota ahumada y la mexicana es amaderada. La vainilla es un ingrediente clave en muchos perfumes, conocido por su versatilidad y su perfil olfativo rico y diverso.